miércoles, 23 de marzo de 2011

Alerta EU sobre radiación “extremadamente alta” en Fukushima

Alerta EU sobre radiación “extremadamente alta” en Fukushima
Los trabajadores que operan para evitar la catástrofe nuclear podrían estar expuestos a niveles “letales” de radiación, advierte

Washington.- Estados Unidos advirtió que los niveles de radiación en la central nuclear de Fukushima son “extremadamente elevados” debido a la situación crítica en los reactores de la planta, particularmente en el cuarto, que se ha secado.

Asimismo, alertó que los trabajadores que realizan esfuerzos extraordinarios para evitar la catástrofe nuclear podrían estar expuestos a niveles “letales” de radiación.

El director de la Comisión Regulatoria Nuclear estadunidense (NRC), Gregory Jaczko, compareció ante el Congreso de su país y allí expuso la situación, en particular la del reactor número cuatro.

“Creemos que la muralla secundaria de confinamiento ha sido destruida, que no hay más agua en las piscinas con los combustibles gastados y que los niveles de radiación son extremadamente elevados”, advirtió.

Gregory Jaczko no dijo cómo obtuvo la información, pero la comisión y el Departamento de Energía de Estados Unidos cuentan con expertos en la planta de Fukushima, que tiene seis reactores.

El núcleo del reactor cuatro no contenía combustible nuclear cuando se produjo el terremoto el viernes pasado, pero tiene combustible nuclear gastado en una piscina de refrigeración, que resultó dañada en la explosión e incendios que ha sufrido esta unidad.

Las barras de combustible gastado necesitan estar cubiertas de agua para impedir que se eleve la temperatura. Si no se enfrían, se dañan y pueden emitir sustancias radiactivas.

PLACAS TECTÓNICAS

PLACAS TECTÓNICAS
Una placa tectónica o placa litosférica es un fragmento de litosfera que se mueve como un bloque rígido sin presentar deformación interna sobre la astenósfera de la Tierra.
La tectónica de placas es la teoría que explica la estructura y dinámica de la superficie de la Tierra. Establece que la litosfera (la porción superior más fría y rígida de la Tierra) está fragmentada en una serie de placas que se desplazan sobre el manto terrestre. Esta teoría también describe el movimiento de las placas, sus direcciones e interacciones. La litosfera terrestre está dividida en placas grandes y en placas menores o microplacas. En los bordes de las placas se concentra actividad sísmica, volcánica y tectónica. Esto da lugar a la formación de grandes cadenas y cuencas.
La Tierra es el único planeta del Sistema Solar con placas tectónicas activas, aunque hay evidencias de que Marte, Venus y alguno de los satélites galileanos, como Europa, fueron tectónicamente activos en tiempos remotos.

DESCUBRIMIENTO

Aunque la teoría de la tectónica de placas fue formalmente establecida en los años 1960 y en los 1970, en realidad esta es producto de más de dos siglos de observaciones geológicas y geofísicas. Por ejemplo, en el siglo XIX se observó que existieron numerosas cuencas sedimentarias en el pasado de la Tierra, con espesores estratigráficos de hasta diez veces los observados en el interior de los continentes, y que estas fueron deformadas posteriormente por procesos desconocidos originando cordilleras montañosas. A estas cuencas se les denominó geosinclinal y al proceso de deformación orogénesis. Otro descubrimiento del siglo XIX fue la documentación de una cadena montañosa o "dorsal" en medio del Océano Atlántico que observaciones posteriores mostraron que se extendía formando una red continua por todos los océanos.
Un avance significativo en el problema de la formación de los geosinclinales y sus orogénias ocurrió entre 1908 y 1912 cuando Alfred Wegener propuso que las masas continentales estaban en movimiento y que estas se habían fragmentado de un supercontinente que denominó Pangea. El movimiento de las masas continentales deformarían los sedimentos geosinclinales acumulados en sus bordes levantando nuevas cadenas montañosas. Wegener creía que los continentes se deslizaban sobre la superficie de la corteza bajo los océanos como un bloque de madera sobre una mesa y que esto se debía a fuerzas de marea producto de deriva de los polos. Sin embargo, pronto fue demostrado que estas fuerzas son del orden de una diez millonésima a una centésima de millonésima de la fuerza de gravedad, lo que hacia imposible que estas pudieran plegar y levantar las masas de las cordilleras montañosas.

Tipos de placas

Las placas litosféricas son esencialmente de dos tipos, en función de la clase de corteza que forma su superficie. Hay dos clases de corteza. la oceánica y la continental.
  • Placas oceánicas. Son placas cubiertas íntegramente por corteza oceánica, delgada y de composición básica. Aparecerán sumergidas en toda su extensión, salvo por la presencia de edificios volcánicos intraplaca, de los que más altos aparecen emergidos, o por arcos de islas en alguno de sus bordes. Los ejemplos más notables se encuentran en el Pacífico: la placa Pacífica, la placa de Nazca, la placa de Cocos y la placa Filipina.
  • Placas mixtas. Son placas cubiertas en parte por corteza continental y en parte por corteza oceánica. La mayoría de las placas tienen este carácter. Para que una placa fuera íntegramente continental tendría que carecer de bordes de tipo divergente (dorsales) en su contorno. En teoría esto es posible en fases de convergencia y colisión de fragmentos continentales, y de hecho pueden interpretarse así algunas subplacas de las que forman los continentes. Valen como ejemplos de placas mixtas la placa Sudamericana o la placa Euroasiática.

PLACAS TECTÓNICAS DEL MUNDO

Principales placas tectónicas.
  • Principales placas:
  • Placas secundarias:
  • Otras Placas:
  • Microplacas

LÍMITES DE PLACA

Las placas limitan entre sí por tres tipos de situaciones.
Topografía de las dorsales que revela su estructura simétrica.
  1. Límites divergentes. Corresponden al medio oceánico que se extiende, de manera discontinua, a lo largo del eje de las dorsales. Estas dorsales tienen una longitud de unos 65000 Km. La parte central de la dorsal está constituido por un amplio surco denominado valle de rift, por el que asciende magma desde el manto y provoca una actividad volcánica lenta pero constante.
  2. Límites convergentes. Allí donde dos placas se encuentran. Hay dos casos muy distintos:
    1. Subducción. Una de las placas se dobla, con un ángulo pequeño, hacia el interior de la Tierra, introduciéndose por debajo de la otra. El límite viene marcado por la presencia de una fosa oceánica o fosa abisal, una estrecha zanja cada uno de cuyos flancos pertenece a una placa distinta.
    2. Colisión. Se originan cuando la convergencia facilitada por la subducción provoca la aproximación de dos masas continentales. Al final las dos masas chocan, levantándose un orógeno de colisión, con los materiales continentales de la placa que subducía tendiendo a ascender sobre la otra placa. Las mayores cordilleras, como el Himalaya o los Alpes se forman así.
  3. Límites de fricción. Es como llamamos a la situación en que dos placas aparecen separadas por un tramo de falla transformante. Las fallas transformantes quiebran transversalmente las dorsales, permitiéndoles desarrollar un trazado sinuoso a pesar de que su estructura interna exige que sean rectas. Topográficamente las fallas transformantes aparecen como estrechos valles rectos asimétricos en el fondo oceánico. Sólo una parte del medio de cada falla es propiamente límite entre placas, proyectándose los dos extremos cada uno dentro de una placa.
BORDES DE PLACA
Mapa de densidad de terremotos. Se observa la concentración de ellos en los bordes de placa.
Las zonas de las placas contiguas a los límites, los bordes de placa, son las regiones de mayor actividad geológica interna del planeta. En ellas se concentran:
  • El vulcanismo: La mayor parte del vulcanismo activo se produce en el eje de las dorsales, en los límites divergentes, pero al ser submarino y de tipo fluidal, poco violento, pasa muy desapercibido. Detrás vienen las regiones contiguas a las fosas por el lado de la placa que no subduce.
  • La orogénesis: es decir, el levantamiento de montañas. La orogénesis acompaña a la convergencia de placas, tanto donde hay subducción, donde se levantan arcos volcánicos y cordilleras, como los Andes, ricas en volcanes; como en los límites de colisión, donde el vulcanismo es escaso o ausente, pero la sismicidad es particularmente intensa.
  • La sismicidad: Existen terremotos intraplaca, originados en fracturas en las regiones centrales y generalmente estables de las placas; pero la inmensa mayoría se producen en bordes de placa.

 

lunes, 14 de marzo de 2011

TERREMOTO DE JAPÓN

TERREMOTO DE JAPÓN
El poderoso terremoto de 8,9 grados en la escala de Richter que sacudió a Japón el pasado viernes movió al país de lugar.
Japón se desplazó una distancia de tres a cuatro metros hacia el este, por lo que se encuentra ahora más cerca de Estados Unidos y más lejos de Rusia.
Tras registrarse el movimiento telúrico, una estación de GPS, ubicada cerca del epicentro en Sendai, se desplazó casi 4 metros (13 pies), según datos del Servicio Geológico de Estados Unidos, USGS (por sus siglas en inglés).
Japón es "más ancho de lo que era antes", dijo Ross Stein, geofísico del USGS.
Pero los científicos explican que no toda la isla principal del archipiélago japonés se movió hacia el este.
Según el geofísico Kenneth W. Hudnut, del USGS, el cambio ocurrió mayoritariamente en áreas cercanas a la zona del epicentro, y las estaciones más alejadas mostraron mucho menos movimiento.
Según explicó a BBC Mundo el geofísico Brian Baptie, del British Geological Survey, (Centro Británico de Inspección Geológica) (BGS), este es un fenómeno frecuente cuando ocurren megaterremotos, también llamados terremotos interplaca.
Megaterremotos
Los megaterremotos ocurren en zonas de subducción, en los límites convergentes de las placas tectónicas, donde una se hunde para colocarse debajo de la otra.

Las figuras provocadas por el sismo son visibles en las carreteras de Japón.
Justo en una zona como esa ocurrió el terremoto del pasado viernes.
"En el caso del terremoto de Japón, la placa del Pacífico, que converge en la costa este de la isla con la placa de América del Norte, fue empujada y se colocó por debajo de Japón", explica el geofísico Baptie a BBC Mundo.
Como ambas placas han estado juntas durante tantos años, se acumula una gran cantidad de energía, que se libera cuando hay una ruptura en la línea divisoria entre ambas placas.
"En este caso la ruptura fue de unos 500 kilómetros de longitud, y durante los aproximadamente 200 segundos que duró el terremoto, las placas se rozaron una con la otra, y como promedio se distanciaron unos 10 metros".
"Ese movimiento se conoce como desplazamiento cosísmico, que resultó en que Japón se desplazara hacia el este por unos tres a cuatro metros", explica el especialista del Reino Unido.
Otro resultado de este movimiento de las placas tectónicas fue que la altitud de la zona costera descendió en unos 60 cm, lo cual permitió que el tsunami generado tras el terremoto avanzara más rápido y más adentro del territorio.
CAMBIO EN EL EJE DE LA TIERRA
La ruptura fue de unos 500 kilómetros de longitud, y durante los aproximadamente 200 segundos que duró el terremoto, las placas se rozaron una con la otra, y como promedio se distanciaron unos 10 metros.
Brian Baptie, British Geological Survey
Además, el fuerte sismo inclinó el eje de la Tierra.
Cuando ocurren estos movimientos tan fuertes en la corteza terrestre, provocan cambios en la forma como se distribuye la masa del planeta.
Al redistribuirse el peso de la Tierra, se afecta el momento de inercia y se mueve el eje sobre el cual gira nuestro planeta, así como su velocidad de rotación.
En este caso, científicos de la NASA calcularon que el eje de la Tierra se inclinó ligeramente unos 16 centímetros.
Según Richard Gross, un científico del Laboratorio de Propulsión Jet de la agencia espacial estadounidense, NASA, este cambio representa que la duración del día se redujo en 1,8 microsegundos (un microsegundo equivale a una millonésima de segundo).
EFECTO DE LOS MEGATERREMOTOS
·  Japón, 8,9
Cambio en la inclinación del eje de la Tierra: 16 cm
Cambio en la duración del dia: 1,8 microsegundos
·  Chile, 8,8
Cambio en la inclinación del eje de la Tierra: 8 cm
Cambio en la duración del dia: 1,26 microsegundos
·  Terremoto de Sumatra, 9,1
Cambio en la inclinación del eje de la Tierra: 7 cm
El poderoso terremoto de magnitud 8,8 que sacudió a Chile en febrero de 2010, acortó en 1,26 microsegundos la longitud de cada día en la Tierra.
Además, el movimiento telúrico habría inclinado el eje terrestre en unos 8 centímetros.
Este mismo cálculo se realizó con el terremoto de Sumatra-Andamán de magnitud 9,1 en 2004, que pudo haber acortado la duración de los días en 6,8 microsegundos e inclinado el eje terrestre en unos 7 centímetros.
 

lunes, 7 de marzo de 2011

CORALES MARINOS.

CORALES.
Los corales marinos son animales coloniales pertenecientes al filo Cnidaria, clase Anthozoa. Las colonias están formadas por miles de individuos zooides y pueden alcanzar grandes dimensiones. El término coral no tiene  ningún significado taxonómico y es poco preciso; suele usarse para designar los antozoos que generan un esqueleto calcáreo duro, especialmente los que construyen colonias ramificadas; pero también es común denominar coral a especies con colonias compactas (coral "cerebro") e incluso con esqueleto córneo y flexible, como las gorgonias.
   
                          Coral en forma de pilar.   
Coral «cerebro».
Biología
De las aproximadamente 48.000 especies reconocidas de vertebrados, más de la mitad son peces. De estas, más del 60 por ciento viven exclusivamente en ambientes marinos. A pesar que los arrecifes de coral son menos del uno por ciento del área total de los océanos del mundo, aproximadamente la mitad de todas las especies conocidas de peces marinos se encuentran concentradas en estas aguas tropicales poco profundas.
Los humanos constituyen aún la mayor amenaza para los arrecifes de coral. En particular la contaminación terrestre y la sobrepesca son las mayores amenazas para estos ecosistemas.

Problemática

En la actualidad, podemos disfrutar de estos bellos ecosistemas que por desgracia se encuentran en problemas. Se distribuyen en ecosistemas y se encuentran amenazados por 2 tipos de causas: naturales y antrópicas (hombre como origen). En las primeras caben destacar los efectos de las olas generadas por los huracanes que azotan a los trópicos. Son también afectados por los cambios bruscos de temperatura y la salinidad del agua, 2 características ambientales clave y que afectan directamente a los animales en su conjunto, y la depredación por otros organismos tales como peces, caracoles y estrellas de mar, también perjudiciales para esta maravilla de animales acuáticos coloniales. En estos arrecifes se produce un crecimiento rápido de las algas que pueden matar a los corales al competir ambos entre sí por luz y espacio. Pero los corales han evolucionado durante millones de años para lograr adaptarse para mejorar su defensa frente a las causas naturales. Una muestra de estas adaptaciones son la alta fecundidad, la producción de nematocistos y extender sus pólipos solo de noche; muy exitosas hasta el momento.
Desafortunadamente hay otras amenazas para las cuales no se han adaptado, los llamados efectos antropogénicos tales como la contaminación, la destrucción de los manglares, la erosión del suelo, la deforestación, la sobrepesca, la extracción indiscriminada, los excesos en el turismo marino y el cambio climático son algunos de los factores que podrían desestabilizar el ecosistema. La contaminación puede afectar de varias formas a los corales, dependiendo de cuál sea el contaminante en cuestión que se esté dando, así pues tenemos como ejemplo:
Contaminación por petróleo.
Los derrames de petróleo afectan la tasa de crecimiento y los sistemas de reproducción de los corales. Este impacto se ve agravado por los dispersantes utilizados después de un derrame, ya que aumentan las amenazas y pueden hasta matarlos. Los escurrimientos de combustible de los barcos también les causa daño: en 1998, el barco Emily Cheremie destruyó más de 400 metros de arrecife frente a las costas de Quintana Roo. Tras describir la contaminación por petróleo, hay que destacar que cualquier sustancia que afecte la claridad del agua, como el exceso de sedimentación causada por los dragados de las costas y la erosión ocasionada por la deforestación, afectará a las zooxantelas y su habilidad de fotosintetizar. Las aguas usadas y fertilizantes aumentan la cantidad de materia orgánica y por tanto causan eutrificación en el agua. Esto estimula el crecimiento de las algas que asfixian a los pólipos al crecer más rápido que los corales, y compiten por espacio en el suelo marino con éstos. Los contaminantes por agentes químicos o biológicos pueden ser tóxicos y matan los corales. La descarga de aguas calientes de plantas generatrices de energía es tan letal como cualquier veneno ya que los corales están adaptados a las temperaturas estables del trópico.

                                       
coral en fondo marino
El crecimiento de la actividad turística ha dañado a los arrecifes con las descargas de aguas negras y la contaminación tóxica. Los barcos que tiran las anclas en los arrecifes o que encallan pueden destruir un coral de más de cien años de edad en cuestión de segundos, tirando basura o alterando el equilibrio de las comunidades al pescar demasiados peces y poner en peligro la capacidad reproductiva de las poblaciones. Algunas evidencias que nos muestran que los arrecifes pueden estar en peligro están siendo reportadas en los últimos años. La existencia de buzos descuidados, pueden tocar y romper el coral; los turistas son también responsables del enorme crecimiento del comercio de curiosidades marinas, en especial de especies amenazadas como el coral negro. Además de ser un hábitat insustituible, los arrecifes son rompeolas naturales que se auto reparan y protegen el litoral, sin costos para el hombre. Los arrecifes de coral proveen alimento y protección para un sinnúmero de criaturas marítimas, como erizos, tortugas de carey, cangrejos, langostas y un largo etcétera. Alteraciones tanto naturales como realizadas por el hombre pueden afectar la compleja cadena alimenticia que se ha desarrollado alrededor del arrecife. Para poder enfrentar estos problemas y proteger a los arrecifes, debemos seguir actuando. Greenpeace trabaja por la protección de los arrecifes de coral a través de una combinación de esfuerzos locales, regionales e internaciones.

Cambio del clima global

La respuesta de estos ecosistemas ante el cambio climático se conoce como blanqueo de coral. Cuando enfrentan un extremo y prolongado estrés por el calentamiento de las aguas tropicales, el coral expele las algas (zooxantelas) que viven en sus tejidos, con lo cual pierde su color natural y adquiere uno blancuzco; al perder su asociación con las algas, el coral muere. Se ha asociado esto a la mortalidad de muchas colonias de corales que en ocasiones parecen recuperarse naturalmente. La enfermedad de banda negra ha sido descrita como tejido necrótico que crece en los corales y parece ser causada por la cianobacteria Phormidium corallyticum. Este fenómeno se ha descrito en muchas áreas tropicales incluyendo el Caribe.
corales blanqueados.
corales sanos.

viernes, 4 de marzo de 2011

CALCULA TU HUELLA ECOLÓGICA

Cada vez somos más conscientes del enorme impacto que los seres humanos tenemos sobre la Tierra y de nuestra capacidad de modificar el medio ambiente con nuestras actividades.

La huella ecológica es una medida indicadora de la demanda humana que se hace de los ecosistemas del planeta poniéndola en relación con la capacidad ecológica de la Tierra de regenerar sus recursos. Representa «el área de aire o agua ecológicamente productivos (cultivos, pastos, bosques o ecosistemas acuáticos) necesarios para generar los recursos necesarios y además para asimilar los residuos producidos por cada población determinada de acuerdo a su modo de vida en específico, de forma indefinida». El objetivo fundamental de calcular las huellas ecológicas consiste en evaluar el impacto sobre el planeta de un determinado modo o forma de vida y, compararlo con la biocapacidad del planeta.